Si me miras, yo te miro, me descubro traviesa, mientras tú embobado me observas, tratando de adivinar si llevo o no llevo algo, que son esas tiras que atraviesan mi culo, ¿la cinta de un tanga, tal vez un látigo travieso, que será?
Me encanta tu mirada traviesa, esa que parece adivinar todos y cada uno de mis pensamientos, entre los que poco queda a la imaginación, pues tu escultural cuerpo apenas cubierto por el tanga, lo dice todo. ¿A qué te apetece jugar?
Me encanta tu mirada traviesa, esa que parece adivinar todos y cada uno de mis pensamientos, entre los que poco queda a la imaginación, pues tu escultural cuerpo apenas cubierto por el tanga, lo dice todo. ¿A qué te apetece jugar?
ResponderEliminar